Italia: Escandalo por los «cementerio de fetos»
El hallazgo de un cementerio de fetos enterrados en tumbas marcadas con los nombres de sus madres conmocionó a Italia. Un grupo de más de 100 mujeres que interrumpieron su embarazo en la última década solicitaron a la fiscalía que investigue el caso, luego de que una de ellas descubriera su nombre en una de las cruces y lo denunciara en redes sociales.
La historia se difundió después de que Marta, una de las damnificadas, contara en su cuenta de Facebook lo que había encontrado en un cementerio de Roma. «Empiezo por escribir que esta no es mi tumba, sino la de mi hijo», dice Marta en la publicación en la que compartía una foto del cementerio Flaminio, ubicado al sudoeste de la ciudad, en la que se ve una cruz blanca encima de una tumba, la cual lleva su nombre.
La mujer había leído sobre los llamados «campos de ángeles» en periódicos locales y decidió visitar el sitio. Allí se encontró con decenas de cruces. La publicación se viralizó y despertó una ola de denuncias de otras mujeres que hallaron tumbas con sus nombres. Tal es el caso de Francesca, quien compartió lo que encontró en Flaminio: «Había una tumba a mi nombre, sin mi consentimiento y sin mi conocimiento».
En su caso, como en el de Marta, el aborto fue terapéutico, es decir, se dio porque el embarazo ponía en peligro la salud de la madre. La mujer aseguró que, tras preguntar en el hospital qué había sucedido con el feto, la respuesta fue esquiva. Detrás de estos entierros se encuentran las organizaciones ultracatólicas italianas, denominadas «pro vida», las cuales reclaman en los hospitales los fetos abortados para luego sepultarlos bajo el nombre de sus madres.
Macabro
Según denunciaron grupos activistas que defienden los derechos de la mujer, esta práctica sucede desde hace más de diez años e involucra a más cementerios. Un hallazgo similar ocurrió en el sitio Prima Porte, donde hay cientos de tumbas con restos de fetos. Algunas datan de 2012.
La periodista Jennifer Guerra, autora del libro «El cuerpo eléctrico», fue la primera en investigar las denuncias que había sobre cementerios de fetos en Italia y encontró por lo menos 50 lugares donde hay este tipo de tumbas. La investigación de Guerra encontró los grupos «pro vida» ofrecen este «servicio social» a los hospitales y los municipios para enterrar «dignamente» los restos de los fetos y embriones no reclamados por las familias, ya que, de acuerdo a la legislación, tras 24 horas pierdes los derechos de propiedad sobre ellos.
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